¿Será este un nuevo quebradero de cabeza potencial para los anunciantes? En la carrera por mantener a los internautas contentos y asentarse como la empresa más respetuosa y que más se preocupa por su privacidad y sus intereses, los gigantes de la red han entrado en una guerra por lanzar servicios y realizar movimientos centrados en esas áreas. No son movimientos gratuitos, porque ayudan a reforzar su conexión con esos usuarios y a no perderlos, pero para los demás players de la industria, como han ido demostrando los movimientos pro-privacidad de Apple, tienen un efecto.
Google acaba de anunciar otro movimiento sobre internet, usuarios y el control que estos tienen en los anuncios que ven.
Hace unas semanas, ya anunció que iba a permitir vetar anuncios a permitir a sus usuarios escoger que no se le mostrasen anuncios de temas sensibles. En esa lista se incluyen publicidad de pérdida de peso, dating (para citas) y de maternidad/paternidad y embarazo. Este último nicho – el de los embarazos y sus productos relacionados – es uno de los que se pagan a precios más elevados. También es, para algunas internautas, una de las publicidades más molestas. Google ha identificado estas categorías como sensibles vía estudios internos y las ha convertido en vetables, como los anuncios de alcohol y de apuestas.
Ahora, Google ha anunciado que permitirá tomar decisiones relativas a marcas y, por tanto, anuncios específicos. Vía My Ad Center, los internautas podrán decirle a Google qué marcas específicas quieren ver más en los anuncios.
Los internautas también podrán elegir por temas. Los temas se presentarán en un sistema de forma visual, acompañados de signos de más y de menos. Si se quieren ver menos anuncios sobre un tema, solo hay que darle al menos. Si el tema interesa, la opción será el más. Google piensa que con esto los usuarios podrán, por ejemplo, dar más al tipo de coche que quieren comprar mientras lo buscan (y recibir más anuncios) o reducir la cantidad de anuncios sobre un regalo cuando lo han acabado de comprar.
“Hemos escuchado a los consumidores que quieren más control sobre su experiencia publicitaria, así como mejor transparencia en cómo y por qué se les sirven los anuncios”, explica a AdWeek el director de product management en confianza y privacidad publicitaria de Google, David Temkin. También, el nuevo centro publicitario permitirá escoger qué fuentes de datos se usan y cuándo. Esto es, si quieres que tu actividad de YouTube solo tenga eco en YouTube, puedes bloquear que se empleen esos datos fuera de ese servicio de Google.
Lo que supone para los anunciantes
¿Es preocupante para los anunciantes? Temkin ha asegurado a AdWeek que esperan que el movimiento logre mejorar los datos publicitarios. Piensan que el engagement y el alcance de los anuncios crecerán porque se le estará mostrando la campaña a un consumidor que quiere realmente ver esos anuncios.
Además, asumen que con este movimiento – y con otro que dará más información sobre quién paga qué anuncio – crecerá la transparencia publicitaria, lo que mejorará la percepción de los anuncios.
Por ahora, todo sigue igual, pero al menos en EEUU – que es el mercado en el que los medios han empezado a abordar este nuevo formato publicitario – se espera que este nuevo My Ad Center sea lanzado a finales de este año.