El caso bautizado como “Barçagate”, ha sido un tema de debate durante los últimos años, y ha sido ampliamente cubierto por los medios internacionales. Según un informe de los Mossos añadido al sumario del caso, la trama salió a la luz el 17 de febrero de 2020, cuando el programa Què t’hi Jugues, de la Cadena SER, informó de que la directiva de Bartomeu, el entonces presidente del FC Barcelona, había atacado a través de diferentes cuentas específicas en las redes sociales a personas vinculadas al club y empleados. Esta supuesta trama difamatoria fue orquestada por la empresa externa I3 Ventures, a la que se le pagó seis veces por encima del valor de mercado. Bartomeu fue detenido como resultado de estas investigaciones policiales, y su arresto subraya la convulsa situación de la entidad azulgrana.
Ahora, el caso Barçagate vuelve para hacerse aún más controvertido con el descubrimiento de los pagos que el FC Barcelona ha realizado a José María Enríquez Negreira, el ex vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA). Las portadas de noticiarios y medios deportivos llevan a sus portadas esten uevo escándalo en el que según los informes, el club pagó a la empresa de Enríquez Negreira, Dasnil 95 S.L., al menos 1,3 millones de euros a lo largo de 16 años. La Fiscalía está investigando estos pagos para determinar su motivación, ya que Enríquez Negreira también reconoció que asesoraba al club sobre los árbitros que iban a encontrar en los partidos. El club ha negado que estos pagos tuvieran algo que ver con el arbitraje, alegando que se trataba de “información técnica sobre jugadores de ligas inferiores españolas” para complementar la información necesaria para el equipo técnico de primera y el equipo juvenil. Aun así, el escándalo sigue en aumento, ya que los pagos a Enríquez Negreira ascienden a más de 7 millones de euros desde 2001. Esto ha llevado a muchos deportistas a protestar por la situación del arbitraje en La Liga.
Al margen de todo este entresijo de sucesos alarmantes para el deporte español, y más allá de todas las novedades que se van aconteciendo con el paso de las horas, y que no paran de agravar aun más si cabe el caso del Barçagate, nos lleva a plantearnos la siguiente pregunta. ¿Podría el Barçagate poner en riesgo los patrocinios deportivos y la publicidad de La Liga y el F.C Barcelona? ¿Actuarán los anunciantes de igual modo como en otros casos de corrupción?
Pues la respuesta contundente es Sí. El caso Barçagate puede tener un efecto negativo en el patrocinio y la imagen de marca del FC Barcelona. El escándalo ha provocado una gran cantidad de críticas de los medios de comunicación y de la opinión pública, lo que ha afectado la reputación del club. Esto ha llevado a que algunos patrocinadores se retiraran del club, o incluso a que no quieran asociarse con él. Estas críticas pueden tener un efecto inmediato en los ingresos del club, ya que se ha visto una caída en los patrocinios y en la venta de productos relacionados con el club. Además, el hecho de que el escándalo se haya vuelto un tema de discusión internacional también ha afectado la imagen de marca de Barcelona y de La Liga en general. Esto puede afectar tanto el patrocinio como los ingresos de la Liga, ya que muchas marcas pueden decidir no asociarse con el club o el torneo.
Por poner algunos ejemplos, el escándalo de corrupción de la FIFA en 2015 llevó a la retirada de varios patrocinadores importantes, incluidos Coca-Cola, McDonald’s y Visa. Estos patrocinadores expresaron su preocupación por la falta de transparencia y ética en la organización. En 2020, Nike se retiró como patrocinador de la Federación Brasileña de Fútbol después de que se presentaran cargos contra el presidente de la federación, Ricardo Teixeira, por corrupción. Nike expresó su preocupación por la integridad y transparencia de la federación. Algo que se reprodujo de igual manera tras el escándalo de corrupción en la Liga española en 2019 tras conocerse los sobornos a árbitros y la manipular los resultados de los partidos que llevó a la retirada de patrocinadores como Kelme y Betway. Estos patrocinadores expresaron su preocupación por la reputación de la Liga y su compromiso con la transparencia y la integridad, pero lo que es más importante, todo ello pone en evidencia que no nos encontramos ante casos aislados.
El mandatario de LaLiga Javier Tebas, a través de declaraciones a los medios, ha anunciado que “no habrá sanciones deportivas”, porque el delito, aun reconociendo su existencia, “habría prescrito”, pero que espera a ver cómo avanza la investigación de la Fiscalía. “No es posible que haya sanción deportiva contra el Barcelona”. Recordemos que en 2006, el fútbol italiano fue sacudido por el escándalo de Calciopoli, que involucraba a varios clubes, incluido el Juventus, que fueron acusados de sobornar a árbitros y manipular los resultados de los partidos y posteriormente siendo descendidos de categorías por ello. Sin embargo, la gravedad ante los diferentes casos de corrupción y “supuestos delitos” podría escalar más allá de lo legal, generando una respuesta negativa y el espaldarazo por parte de patrocinadores y marcas. Podemos remontarnos a 2015, cuando la Confederación Brasileña de Fútbol se vio envuelta en un escándalo de corrupción que involucraba sobornos y fraude. Como resultado, Nike y otras empresas retiraron temporalmente su patrocinio de la selección nacional de fútbol de Brasil.
Recordemos que entre los acuerdos y patrocinios del F.C Barcelona, podemos destacar el de marcas como Audi, Qatar Airways, Coca-Cola, Rakuten, Nike o Spotify. Nike es el patrocinador técnico del FC Barcelona desde hace muchos años y es uno de los patrocinadores más importantes del club. La relación entre el FC Barcelona y Nike comenzó en 1998, y en 1999, Nike se convirtió en el proveedor oficial de la ropa de entrenamiento y juego del equipo. Por otro lado, en 2018, el FC Barcelona llegó a un acuerdo de patrocinio con Spotify, el servicio de streaming de música líder en el mundo que también pasó a utilizarse como estrategia de naming para su estadio deportivo. Por su lado, Coca-Cola es uno de los patrocinadores más antiguos del FC Barcelona, y ha estado apoyando al club durante muchos años. Sabiendo esto y conociendo algunos antecedentes, ¿Cómo podría afectar el “Barçagate” a marcas y patrocinadores? ¿Conoceremos una respuesta contundente por parte de las marcas? ¿Afectará también a la reputación nacional e internacional de la propia Liga española?
Hemos de tener en cuenta, que los casos de corrupción deportiva pueden tener un gran impacto en la publicidad y los patrocinios deportivos. Cuando se produce un escándalo de corrupción, los patrocinadores pueden retirar su apoyo debido al impacto negativo que puede tener en su propia imagen de marca, y existen sobradas razones por las que las marcas se apresuran a desvincularse en estos casos. En primer lugar debido al daño a la reputación de la marca. Las empresas patrocinadoras no quieren ser asociadas con organizaciones deportivas que estén implicadas en corrupción, ya que esto puede dañar su propia reputación. Las marcas patrocinadoras buscan estar asociadas con valores como la integridad, la transparencia y la honestidad, y los casos de corrupción pueden contradecir estos valores y afectar la percepción del público de la marca.
De igual forma, otras de las razones importantes es la pérdida de valor del patrocinio. Las empresas invierten grandes cantidades de dinero en patrocinios deportivos para aumentar la visibilidad y el valor de su marca. Si los patrocinadores perciben que los eventos o equipos deportivos en los que invierten están asociados con corrupción, pueden reducir su inversión o retirar su patrocinio por completo, lo que puede reducir el valor del patrocinio para los organizadores deportivos.